Cada árbol tiene unas necesidades de poda específicas, entre ellas la época en que se tiene que hacer o el tipo que se tiene que aplicar
La poda es un proceso necesario para que los árboles se desarrollen correctamente y se mantengan sanos. Sin embargo, hay que tener en cuenta cuando hay que aplicarla y cuando no. En caso que un árbol se tenga que podar, tenemos que saber cuál es la finalidad para saber qué tipo de poda se tiene que aplicar y cuando hacerla.
Lo más importante a la hora de llevar a cabo esta tarea es respetar la estructura natural del árbol y efectuarla cuando sea estrictamente necesario.
Podemos dividir los tipos de poda en dos grandes grupos:
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Poda de formación (en árboles jóvenes)
Se lleva a cabo entre uno y cinco años después de plantar el árbol con el fin que tenga un buen desarrollo. En caso de no hacerse, el árbol crecerá libremente y tomará una forma más “salvaje”. También es importante efectuarla para evitar posibles podas más complejas en la edad adulta del árbol y cortes que tardarán en cerrarse. Hay que tener en cuenta que cada especie requiere más o menos poda.
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Poda de mantenimiento (en árboles adultos)
Se realiza en árboles adultos, es de tipo estético y se tendrá que hacer durante toda la vida del árbol. Normalmente, se ejecuta para mantener la floración o la fructificación correctas según la especie o para eliminar los elementos sobrantes o aclarar las ramas por exceso o debilidad de estas. A pesar de que hay diferentes tipos de finalidad y según el que queramos conseguir se llevará a cabo una acción o la otra.
En octubre empieza la época de poda para muchos árboles, sobre todo para aquellos que se encuentran a la vía pública. En Punt Verd realizamos podas a todo tipo de árboles y contamos con operarios especializados. ¡Pídenos información sin compromiso!